Montaña con bastones y marcha nórdica en montaña

"La técnica de la marcha nórdica es una herramienta de gran utilidad para el practicante de senderismo, montañismo y carreras de montaña. Sin embargo, el valor principal de la marcha nórdica reside en su potencialidad como deporte específico, completo, saludable, apto para todos, económico y practicable en cualquier entorno y condición."  

Todavía me asombra que algo que escribí hace ya cinco años siga teniendo vigencia y se mantenga aún en la página del Comité de Marcha Nórdica de la Federación de Montañismo de la Región de Murcia, a pesar de nuestras divergencias sobre la concepción, tratamiento y difusión de nuestro deporte.

Jaca

Como cada año, he vuelto a disfrutar unos días de nuestros Pirineos, ese paraíso que tenemos entre España y el cielo, tan cerca y, desgraciadamente, tan desconocido para una mayoría de los españoles. De los cuatro días completos vividos desde Jaca, la reina del Pirineo aragonés, el de verdad, dos han sido de puro uso de bastones, que son los que describo a continuación, y otros dos fueron de turismo montañero, que la región da para mucho.  Mucho que ver y disfrutar en demasiado poco tiempo.

Refugio de Bachimaña

El día 24 hicimos una ruta de montaña entre dos refugios de la Federación Aragonesa de Montaña, la Casa de Piedra, en el idílico paraje del Balneario de Panticosa, y el nuevo refugio de Bachimaña, en el ibón  bajo de dicho nombre.  Fue precisamente el deseo de conocer este refugio, que yo había visto construir, pero que no había visitado desde su inauguración, lo que me llevó a realizar este "paseo" montañero, al que los bastones, utilizados con la técnica de la marcha nórdica, contribuyen, tanto para lograr un ejercicio más completo, como para aliviar la carga sobre rodillas y extremidades inferiores en general, y sobre todo, en las bajadas (algo que los corredores por montaña no acaban de entender).  En dos horas y media subimos y bajamos los 149 pisos que contaba la aplicación que llevaba mi cuñado Emilio en el móvil, incluida una parada de bocata de tortilla y cerveza, y una ligera (y satisfactoria) inspección del refugio, para confirmar que está en la línea de excelencia y precio ajustado del resto de sus hermanos aragoneses.  Un buen ejercicio disfrutando de unas vistas espectaculares, en tan corto recorrido, con comida al regreso en la Casa de Piedra, que tan buenos y numerosos recuerdos me trae.

Casa de Piedra

En Baños de Panticosa me encontré con una Compañía del Regimiento de Cazadores de Montaña Galicia 64, haciendo prácticas de escalada y patrullas de montaña.  Me sorprendió ver a todos los componentes de las patrullas andando con bastones de senderismo, así que pregunté a su Capitán y me mostró los bastones plegables Altus que forman parte del equipo individual del combatiente de este Regimiento.  La tropa no recibe instrucción alguna sobre la utilización de este material ya que "su uso es intuitivo" (sic) ... Aquí tengo que decir que estoy bastante de acuerdo.  La técnica de la marcha nórdica es tan racional que no necesita grandes explicaciones.  Los cursos de iniciación no son más que un acelerador del proceso de aprendizaje que, sin duda, puede realizar de forma autodidacta cualquier persona mínimamente coordinada y observadora.  

El día siguiente fue completo de turismo por los preciosos valles occidentales de Aragón, subiendo por la espectacular Foz de Biniés a Ansó, para continuar a Zuriza (incluso pasamos al valle del Roncal y presenciamos el Baile de la Bandera en Isaba), con vistas a los increíbles Alanos, excelente comida en Hecho, con visita a Siresa, y ya de regreso, la obligada parada en los monasterios de San Juan de la Peña, para completar el día con misa mayor en la Parroquia de Santiago, oficiada por el Obispo de Jaca y acompañada por la coral de la capilla catedralicia.

Gradas de Suaso

El día 26 pude superar una asignatura pendiente.  A pesar de las muchas veces que he hecho este recorrido, nunca había completado la subida desde el aparcamiento de Ordesa hasta la Cola del Caballo haciendo marcha nórdica, a buen ritmo.  Una hora y tres cuartos tardamos en el recorrido, casi todo con técnica diagonal, con algunos pasos de doble bastón en las Gradas de Suaso, disfrutando plenamente de un entorno sin par.  La bajada, en el mismo tiempo, con alguna paradita por la lluvia y las fotos, compensadas en las pendientes fuertes con un paso rápido en técnica diagonal disociada.  Después, desde Torla a San Nicolás de Bujaruelo en coche, para darnos un baño ritual en el río Ara, bajo el puente medieval, y reponer fuerzas en su excelente refugio.  Por la tarde, visita a Ainsa, antes de regresar a Jaca.

Puente de San Nicolás de Bujaruelo

El sábado fue día de relax y turismo, con visita a la increíble estación de Canfranc, café y niebla en Candanchú, y comida y compras en Jaca, para volver a Cartagena el domingo.

Y estas son dos de las actividades que la montaña y los bastones te permiten.  Cuando mis alumnos me preguntan, en los cursos de iniciación, "¿cuándo se puede hacer marcha nórdica en montaña?", yo siempre les respondo lo mismo: "siempre que la montaña te lo permita".  Si estamos convencidos de que la técnica de la marcha nórdica es la que mejores beneficios nos proporciona, tanto desde el punto de vista físico, como de progresión, estaremos interesados en utilizarla al máximo, siempre que el terreno nos lo permita.  Pero incluso cuando éste sea difícil, el apoyo a la progresión, equilibrio y soporte que siempre nos proporcionan los bastones, utilizados con una buena técnica, los convierten en el mejor aliado para disfrutar de la montaña, lejos de competiciones, reglamentos y árbitros que nos impidan centrarnos en lo que debemos.

Los Pirineos están ahí, a tiro de piedra, para que los disfrutes con tus bastones.  Pero hasta que puedas ir, no dejes de sacarlos del paragüero, todos los días, y gozar con ellos, aunque sea en un lugar menos idílico.  Tu cuerpo y tu mente te lo agradecerán igual.