jueves, 26 de enero de 2017

Bastones

He recibido los bastones que tenía encargados.  Si hiciste el curso conmigo y necesitas bastones, llámame a partir del lunes y quedamos para que los recojas.  También tengo algunas dragoneras de la talla pequeña.  Si no te arreglas bien con las que llevan los bastones (talla mediana), puedes comprar unas de la talla pequeña (o grande) por 11€.

...y si ya tienes bastones, sácalos del paragüero y dales caña.

lunes, 23 de enero de 2017

Un buen curso, en cantidad y calidad

Ayer tuvimos en Cartagena un nuevo curso de iniciación a la marcha nórdica, el primero de los diez que nos proponemos hacer este año, promovidos, como siempre de forma gratuíta, por el Centro Excursionista de Cartagena, convencido de las bondades que la práctica de este deporte proporciona a sus iniciados.

El curso de ayer contó con 70 participantes, que aprovecharon extraordinariamente las cuatro intensas horas del mismo, sin desfallecer, primero por el viento y luego por el sol.  ¡Unos campeones!  Gracias a Pepe, Alfredo y Geli, que gentilmente me ayudaron.  Su colaboración fue clave para el éxito del curso.

El alcalde de Cartagena fue uno de los alumnos de ayer.  Estupendo, poder contar con un "evangelista" de la marcha nórdica dentro de nuestro consistorio.

Ahora, ya sabéis, a sacar los bastones del paragüero y a darles mucha marcha.

jueves, 19 de enero de 2017

Marcha nórdica y talibanismo

Desafortunadamente, en todas las facetas y actividades de la vida nos encontramos con talibanes, y no me refiero a los integristas musulmanes afganos surgidos de una escuela coránica paquistaní, sino a la segunda acepción que al término atribuye nuestro diccionario, la de fanáticos intransigentes. La marcha nórdica no iba a ser menos.


La marcha nórdica es un deporte en clara expansión. La gente que se inicia en esta benéfica práctica, una vez convencida de las ventajas que le reporta, se convierte en un “evangelista” de la misma, predicador impenitente de sus bondades y maravillas, captando nuevos adeptos que contribuyen de una forma exponencial a su difusión.

En este incremento exponencial de practicantes y, sobre todo, en el potencial de desarrollo que todavía está por eclosionar, no faltan mentes mercantilistas que transforman de forma inmediata todas estas expectativas en cálculos numéricos de libros contables. Tampoco escasean los que ven en un campo por desarrollar la posibilidad de crearse un sitio de privilegio, un nombre o una parcelita de poder, que no se ha podido procurar en otros medios, más concurridos.

Nada tengo, en principio, contra todos ellos. En la medida en que hagan su trabajo de forma honrada y profesional, sin engaños y respetando a los demás, estos personajes pueden rendir un franco servicio a la sociedad con la difusión de algo tan beneficioso, siendo así merecedores de una recompensa, ya sea en “plata” o en “prestigio”.

Honradez, profesionalidad, sinceridad y respeto. Nada más...y nada menos. Esto no es fácil, y las puertas anchas de la vida, las fáciles, las que obvian alguna o todas estas virtudes, son las más buscadas y concurridas por aquellos que, no pudiendo justificar su comportamiento, recurren al talibanismo, fanáticos intransigentes para, denostando lo que hacen los demás, intentar sobresalir e imponerse.

Dentro de las múltiples escuelas de marcha nórdica que proliferan en nuestros días en nuestro país, no hay ninguna que pueda arrogarse un estatus de superioridad sobre las demás. La técnica de la marcha nórdica es algo tan lógico, tan racional, que cualquier persona de azotea medianamente amoblada, llegaría a dominarla en algún tiempo, dadas unas mínimas dotes de voluntariedad y capacidad de observación. Las diferentes escuelas no nos “venden” más que un método de aprendizaje de la técnica, y ciertos “adornos” de la misma que, en el mejor de los casos, pueden facilitar, más o menos, la prontitud en el logro de algún objetivo concreto de la práctica de la marcha nórdica (salud, actividad física, deporte/competición).

Las diferentes longitudes de bastones, o que el método de enseñanza de la técnica se realice en cierto número de pasos, o en un cierto orden, es un derecho de los practicantes, y un privilegio, resultado lógico de la experiencia, de buenos enseñantes, respectivamente. Nunca una exclusiva de una escuela u otra.

Entiendo el legítimo derecho de todos y cada uno a defender que su escuela o su método es el mejor. Siempre podremos discutir el “para qué” es mejor. Lo que no puedo admitir es el que alguien defienda que su escuela o su método es el único (el único válido, el único genuino, el único que merece la pena), excluyendo a todos los demás, tachándolos de intrusistas, advenedizos o de “uso fraudulento de la marcha nórdica” (decía mi padre que para oír cosas sólo hay que estar vivo). ¡Qué barbaridad!

Prevengo a los que lean estos párrafos contra estos personajes, talibanes de la marcha nórdica, que sólo buscan medrar, envileciendo lo que tocan. Cuando oigáis a alguien desprestigiar gratuitamente a quienes no “compran” lo suyo, ¡huid a toda prisa! … pero siempre con vuestros bastones, y disfrutando de ellos.


sábado, 14 de enero de 2017

Charla sobre marcha nórdica en el RCRC

Otra buena experiencia esta mañana, hablando de marcha nórdica en el Real Club de Regatas de Cartagena.  Público numeroso y "entregado", y buenas perspectivas de que organicen "paseos con bastones" por la margen oriental de la ensenada.  Ya tengo algunos de los asistentes apuntados para el curso del día 22.  Gracias a María Escudero, una de mis alumnas convertida en "evangelista" de la marcha nórdica.

Ahora, a sacar los bastones del paragüero.

lunes, 9 de enero de 2017

Nuevo curso de iniciación a la marcha nórdica en Cartagena

El domingo, 22 de enero, de 09.00 a 13.00, tendremos un nuevo curso de iniciación a la marcha nórdica (el 1º de este año en Cartagena) en el paseo de palmeras que hay junto al Parque de la Rosa, frente al UPPER (EuroSpar) de la prolongación de Juan Fernández. Tras esta sesión, en la que seguramente mejorarás tu forma de andar, estarás en condiciones de empezar a utilizar correcta y satisfactoriamente los bastones, y adquirirás los conocimientos teórico-prácticos necesarios para auto-perfeccionar la técnica y aumentar sus beneficios. Si quieres asistir, mándame un correo (nordicartagena@outlook.com) con tu nombre, teléfono y, si eres miembro del CExCartagena, tu número de socio. Contestaré a todos los correos que incluyan toda esta información. El curso es gratuito y abierto a no socios; los niños son muy bienvenidos, acompañados de un adulto responsable; sólo necesitas traer ropa cómoda, zapatillas de deporte (aconsejable guantes finos o de ciclismo, gorra y gafas para el sol) y dos bastones de marcha nórdica. Si no los tienes, no te preocupes, el CExCartagena tiene bastones para fomentar el aprendizaje de este deporte. Los bastones normales de senderismo no son los mejores para esta práctica deportiva, aunque pueden utilizarse sin mayor problema. Si vas a necesitar bastones del club, DÍMELO. No se trata de una excursión sino de una actividad de aprendizaje que, aún siendo de baja intensidad física, exige cierto esfuerzo. Si tienes alguna lesión cardíaca, consulta con tu médico antes de asistir.
Por otra parte, a la vista de la dificultad para comprar bastones de marcha nórdica en nuestra ciudad, el CExCartagena facilita la adquisición de bastones a los alumnos que lo deseen, a precio de coste (31€/par). Si tienes intención de adquirir bastones, procura traer el dinero justo.
Para cualquier duda, contacta directamente conmigo,

José Antonio Pérez González (Piri) - 659657981 (nordicartagena@outlook.com).

martes, 3 de enero de 2017

EL DEPORTE DE LA MARCHA NÓRDICA

En la página web de la Federación de Montañismo de la Región de Murcia, el Comité de Marcha Nórdica (MN) dice que “La técnica de la MN es una herramienta de gran utilidad para el practicante de senderismo, montañismo y carreras de montaña. Sin embargo, el valor principal de la MN reside en su potencialidad como deporte específico, completo, saludable, apto para todos, económico y practicable en cualquier entorno y condición.”
En cada uno de mis cursos de iniciación es mi constante preocupación transmitir a los alumnos este extremo. La MN no es una herramienta para fines de semana alternos, aunque también la podamos utilizar en esas ocasiones. La MN es un DEPORTE, así, con mayúsculas, porque no sólo reúne las características de “Actividad física ejercida como juego o competición, cuya práctica supone entrenamiento y sujeción a normas” y “Recreación, pasatiempo, placer, diversión o ejercicio físico, por lo común, al aire libre”, que atribuye nuestro Diccionario a la voz “deporte”, en sus dos acepciones, sino que, además, reúne dichas características en grado superlativo.
De la misma manera que cualquier corredor sale a correr tres o más días por semana, o que un nadador va a la piscina otros tantos, un nordimarchador sale con sus bastones todos los días que puede, consciente de que la abundancia en la práctica repercutirá en su entrenamiento físico y, por ende, en su salud y bienestar general.
Pero, además, la MN tiene extraordinarias ventajas sobre otros deportes populares. Por citar unas pocas, la MN se puede practicar en cualquier lugar, sin más equipo especial que un barato par de bastones, y es un ejercicio tan racional y equilibrado que difícilmente vamos a notar repercusiones negativas por sobrecargas, y el retardo en la aparición del cansancio nos va a permitir una práctica mucho más prolongada en el tiempo que otros deportes individuales.
Esta es la principal razón por la que no quiero que mis alumnos dependan de que yo les organice salidas periódicas. El deporte individual, como la MN, tiene la gran ventaja de que lo puedo adaptar a mi disponibilidad, sin depender de otros para su práctica. Mi experiencia me dice que cuando el neófito se acostumbra a salir en grupo, pierde la capacidad de utilizar esta ventaja, y la MN acaba perdiendo su plena condición de deporte individual, para convertirse en una actividad circunstancial, dependiente del organizador, o de la disponibilidad del grupo, algo mucho más complicado y nada parecido a la constancia y frecuencia que requiere un entrenamiento para que notemos sus beneficios.
Esto no quiere decir que la MN no se pueda practicar en grupo. Todo lo contrario. Es siempre un placer compartir un paseo con gente que comparte nuestra afición, y una gran oportunidad de aprender, corregir y mejorar nuestra técnica. Pero de ninguna forma debemos condicionar nuestra práctica deportiva a la disponibilidad o al ánimo de otros.
Recurriendo al tan manido símil, quien saca un grupo de nordimarchadores para una práctica más o menos periódica, es como el que da pescado a un hambriento. Una loable acción. Pero yo pienso que es mejor enseñarle a pescar, dándole así la oportunidad de que pueda resolver su problema de una vez por todas, sin depender de la caridad ajena. Creo que todos los instructores deberíamos tener esto muy claro y no fomentar la dependencia del grupo. Si no, los neófitos pasarán hambre el día que el grupo les falle, o no comerán todo lo que necesitan.

En conclusión, si hemos decidido que la MN es nuestro deporte, tratémosla como tal. Practiquémosla con tanta frecuencia como nos sea posible, con la intensidad y tiempo que podamos o nos apetezca, sin depender de nadie. Salgamos en grupo cada vez que podamos o nos apetezca, pero sin que el grupo condicione nuestra sacrosanta práctica habitual. Y siempre, siempre, disfrutando de ese plus que nos dan los bastones cada vez que los sacamos del paragüero.