Decía
Don Antonio Machado (Soledades, 1903), tras confesar haber andado
muchos caminos y navegado en cien mares, haber visto en todas partes
borrachos de sombra negra, … mala gente que camina y va apestando
la tierra…
El
Maestro constataba, con su ágil y acertada pluma, que todo en la
vida tiene un lado oscuro, fruto de la maldad que forma parte de
nuestra esencia: el bien y el mal, el ying y el yang, que lo impregna
todo. Y la marcha nórdica, su mundo, no iba a ser la excepción.
En
nuestra España, los que llevamos tiempo en esto, hemos visto y
sufrido estas gentes desde antiguo. Yo los llamo a veces talibanes,
por su incapacidad para admitir otros puntos de vista, ya sean
referidos a escuelas, técnicas o, simplemente, visiones generales
sobre este deporte. Y no sólo no admitir, que eso podría tener
explicación, sino, además, atacar y difamar a los que no son de su
cuerda.
A
veces se parecen más a los fariseos bíblicos, repartiendo
excomulgaciones y castigos divinos a diestro y siniestro, a los que
ellos deciden que no son suficientemente ortodoxos en su pensamiento
o su práxis, desde un supuesto pedestal de perfección que ellos
mismos, a nada que se les observe con atención, están bien lejos de
alcanzar.
Finalmente,
para no olvidarme de mi propia religión en este recorrido por el
lado oscuro de las tres monoteístas “del Libro”, a veces se
muestran estos pajarracos como inquisidores generales, con licencia
para condenar al fuego (tanto al físico como al eterno) a todo aquél
que no se ajusta a “sus” normas; normas que, dicho sea de paso,
ellos mismos incumplen cada vez que les viene en gana.
No
se trata de tres personajes distintos, sino de tres caras de un mismo
personaje: el borracho de sombra negra de Machado.
Los
que llevamos tiempo en esto, los hemos visto atacar, insistir y
persistir. Las redes sociales, con todas sus bondades, son terreno
abonado para la supervivencia de esta especie, que ellos dominan,
utilizan y manipulan a su antojo para ocultar su incompetencia o para lograr sus fines espurios, bajo
escusa de pretender el mejoramiento de la marcha nórdica y de sus
practicantes, o de dotarla de un pretendido marchamo de calidad en
base al coste económico de su difusión o del material “necesario”
para su práctica, que deja a estos personajes, de paso, unos buenos
dividendos.
La
marcha nórdica es algo muy simple: un ejercicio Lúdico, Sano y Deportivo (LSD Y MARCHA NÓRDICA), apto para todos y para todo, con una técnica
sencilla, pero eficaz para obtener el máximo beneficio de la
utilización de los bastones, la enseñe quien la enseñe,
independientemente de cómo la enseñe. Nadie tiene la llave del
calabozo para enseñarla ni practicarla. No hacen falta cursos de 15
horas para iniciarse en su práctica, ni cursos tras cursos para
perfeccionar una técnica, simple, que se aprende en menos de cinco
horas (los menos coordinados) y se perfecciona sólo con el interés
y la constancia del practicante en que tal perfeccionamiento suceda.
Los
que van llegando a este mundo pueden ver cosas de difícil
explicación, fruto de la
perversa
actividad
de estos elementos, que pueden llevarles a pensar que se han
equivocado de deporte; que
esto no es tan bueno como se lo habían pintado. Por ellos y para
ellos escribo esto hoy: la marcha nórdica es como todo en la vida;
también tiene su lado oscuro. Pero
todo ying tiene un yang (o
viceversa, que nunca he sabido bien quién es quién).
Si
seguimos leyendo la poesía de Don Antonio, el
Maestro también ha visto en
todas partes gentes que danzan o juegan, cuando pueden, y laboran sus
cuatro palmos de tierra … y no conocen la prisa ni aun en los días
de fiesta. Donde hay vino, beben vino; donde no hay vino, agua
fresca. Son buenas gentes que viven, laboran, pasan y sueñan.
Y,
a modo de corolario, mi consejo para recién llegados y veteranos hastiados: quedaos con el lado positivo de este
deporte, con sus buenas gentes, que las tiene, y en cantidad. Estoy
seguro de que no os decepcionará. … Y pasad del lado oscuro.
Cuando veáis por ahí cosas raras, dejad de leer, cambiad de
frecuencia, dejad a los cuervos que graznen, y sacad los bastones del
paragüero. Después de media hora de práctica empezaréis a ver
las cosas claras … o de otra manera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si estás registrado en este blog, tus comentarios son más que bienvenidos. La moderación de comentarios, por mi parte, se limita a evitar los que falten al respeto mínimo debido a otras personas, y nunca a censurar opiniones contrarias a las mías.